Bote de cocina 1,5L hermético de cristal WMF

Description

Los Botes de cristal herméticos de WMFson unos botes elegantes y de lo más prácticos para la cocina. En ellos podrás conservar de todo, desde café, arroces, pasta y todo tipo de frutos secos, a cacao, caramelos, avena, harinas y todo lo que requiera de estar en un sitio seco y en las mejores condiciones. ¡Incluso puedes guardar galletas, que se mantendrán de lo más crujientes!

Estos tarros de cristal con tapa de acero inoxidable Cromargan®, ofrecen un cierre hermético, que aísla a la perfección.

Al ser de cristal sabrás en todo momento qué hay en cada bote y si has de reponer pronto. Y como además no cogen olores ni sabores, podrás utilizarlos para almacenar alimentos diferentes cada vez que quieras variar el contenido, sin temor ni invasión de olores.

Y resultan muy fáciles de limpiar, ya que los puedes lavar en el lavavajillas.

Por qué nos gustan los Botes de cocina con tapa WMF

Gracias a su cierre hermético podrás guardar todo tipo de alimentos y mantenerlos en perfecto estado durante más tiempo.

Las distintas medidas te permiten conservar en su interior los alimentos según las cantidades que suelas comprar y utilizar.

Fabricados en cristal de alta calidad y acero inoxidable 18/10 Cromargan®, siendo aptos además para el lavavajillas.

Medidas

• Altura 28,5 cm
• Diámetro: Ø 9,7 cm
• Capacidad 1,5 l

La historia de WMF

Líder en menaje en Alemania y un referente a nivel mundial, WMF es una empresa fundada en 1853 en Geislingen (Alemania), que en origen producía todo tipo de artículos de metal. Con casi 6000 empleados en la actualidad, WMF dispone de 40 oficinas en todo el mundo y es conocida por la calidad, resistencia y excelente diseño de sus productos. De WMF han nacido productos como la Olla a presión.

El acabado Cromargan®, patentado en 1930 por la compañía WMF, es exclusivo de sus productos. Esta aleación de acero inoxidable con una combinación ferrosa 18/10 confiere al artículo una gran resistencia al rayado y es resistente a los ácidos. Tanto si el acabado es en brillo como si es en mate satinado, el Cromargan® es más fácil de limpiar que otros acabados y ofrece un aspecto invariable de por vida.